En el 2016 suman 615 créditos con inversión de 738 mil dólares
Un grupo de 41 madres en extrema pobreza de Machala cristalizarán el sueño de tener su pequeño negocio con la inversión del crédito de desarrollo humano de USD. 1.200 cada una concedido a cada una por parte del Gobierno Nacional a través del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) para el desarrollo de emprendimientos productivos.
En un sencillo acto desarrollado en las instalaciones del MIES, liderado por la Gobernadora (e) Rocío Luna y el Director del MIES, Distrito Machala, Jandry Vilela, estas madres beneficiarias del Bono de Desarrollo Humano, recibieron las órdenes de retiro de la operación crediticia de parte de las autoridades.
La titular de la Gobernación, Rocío Luna, les dijo que la facilidad crediticia es entregada como un derecho en el marco de la política pública gubernamental de erradicar la pobreza y les felicitó por los emprendimientos que desarrollarán con la inversión.
De su parte la autoridad del MIES, Jandry Vilela, señaló que explicó que en lo que va del año se han entregado 615 créditos a igual número de beneficiarios del bono con una inversión de 738 mil dólares; “aquí está el gasto público, invirtiéndose en el desarrollo de los más pobres, sentenció el funcionario.
El crédito de desarrollo humano registra historias de dignidad: Paola Yánez, de 29 años vive en el barrio urbano marginal Los Sauces y fue elegida presidenta de la asociación de hecho Mirando un Porvenir Mejor conformada por 18 emprendedoras. Esta madre de dos niños recibió su segundo crédito, invirtió en un negocio de depósito de madera.
“Empecé de a poco con el primer crédito con la ayuda de mi tío que me enseñó el negocio de la madera, mi afán es incrementarlo y tener mi mueblería, confiesa Paola, quien agregar sentirse más independiente y segura en sí misma.
Mayra Fernández es otra historia de dignidad, ella lidera la asociación Buscando Bienestar para el Futuro y tiene su pequeña tienda de cosméticos multinivel: “con el crédito voy a invertir más en el negocio y mi meta es convertirme directora, expresa esta joven madre”.
El crédito de desarrollo humano se enmarca en la política pública de inclusión económica y social que ejecuta el Gobierno Nacional a través del MIES, entidad que tiene la misión de garantizar los derechos de las personas vulnerables.
La operación crediticia se entrega a 2 años plazo, pagaderos con el valor mensual del bono; se otorga a personas en situación de extrema pobreza que reciben el bono de desarrollo humano, que registran 28.2 de calificación en el registro social y previo a una capacitación sobre contabilidad básica, marketing y administración del negocio.
Las personas son organizadas en asociaciones de hecho, por ello a esta modalidad se le denomina asociativa. Los emprendedores reciben luego acompañamiento para asegurar el éxito del negocio o unidad productiva.
El 97% de los beneficiarios son mujeres, madres, en su mayoría madres solteras, en condiciones de extrema pobreza, con un promedio de 3.5 hijos cada una. Los negocios que se desarrollan con el crédito son en su mayoría pequeñas tiendas, comedores, gabinetes de belleza, venta por catálogo, cría de aves y cerdos a pequeña escala.
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